El humo de colores es un fenómeno que se produce cuando se quema una sustancia con ciertas propiedades químicas que permiten que el humo generado por la combustión tenga un color diferente al habitual.
Existen diversas sustancias que pueden utilizarse para generar humo de colores, como por ejemplo cloruro de cobre para el color verde, cloruro de sodio para el color amarillo, cloruro de calcio para el color rojo y ácido bórico para el color blanco.
En algunos casos, se añade la sustancia química en cuestión al combustible utilizado para generar humo, mientras que en otros se coloca directamente en el aire a través de generadores especiales.
El humo de colores se utiliza principalmente con fines estéticos y espectaculares en eventos y celebraciones, como conciertos, festivales y espectáculos.
Es importante tener en cuenta que algunos de los componentes químicos utilizados para generar humo de colores pueden ser tóxicos e incluso cancerígenos, por lo que se recomienda su uso controlado y responsable en entornos adecuados y protegidos.